Volcados al streaming

Por OscarFernando

Con el anuncio de Disney de que sus contenidos básicos, es decir, los de sus películas y series bajo su propio sello, y los de Pixar que fácilmente se identifican también como Disney, migrarán de Netflix a una plataforma propia de streaming, inicialmente en los Estados Unidos, y a reserva de que en un futuro saquen también los contenidos de Marvel y de Lucasfilm, los mercados no se tomaron la noticia exactamente bien, de hecho, el martes 8 que se hizo público esto las acciones tanto de Disney como de Netflix cerraron con pérdidas, pero era algo previsible; no debe sorprender.

Para empezar, el nombre correcto del streaming es vídeo en demanda, y prácticamente todas las compañías televisivas de los Estados Unidos están optando por crear cada una su propio servicio, con lo que Netflix en un futuro, quizás a mediano o largo plazo se quedará básicamente solo con contenidos originales, que son muy buenos, pero tendrán que redoblar sus esfuerzos para crearlos pues gran parte de su atractivo al momento son los contenidos de Disney, de Warner y de canales canadienses. De hecho, cabe destacar que Netflix no es el único servicio de este tipo, sólo es el más dominante, existen otros como Hulu, y esa preponderancia es la que perderá con el tiempo al migrar gradualmente los contenidos de Disney y otras empresas como Warner.

¿Qué es lo que pasará? No sólo las bolsas no tomaron bien la noticia, el público inmediatamente manifestó del mismo modo su descontento, pues obviamente piensan que en determinado momento se volverá imposible tener más de un servicio de vídeo en demanda, pues Disney anunció que posiblemente Marvel y Lucasfilm eventualmente tengan sus propios canales de streaming, similar al anuncio de Warner de crear un canal exclusivo de contenidos DC, cuando ya de por sí existe otro servicio de una de sus empresas parentales, HBO GO, y como ya tiene otros, y como existe de CBS en los Estados Unidos o como hay también de Fox. Hasta el momento se sabe muy poco del servicio para contenidos DC, ni siquiera tiene aún nombre, sólo que iniciará con dos series, una animada y una en acción real, es decir, un contenido ridículamente reducido, si bien es bastante probable que eventualmente migren ahí los contenidos ya existentes del canal The CW, Arrow, The Flash, Supergirl, etc., como ahora aparecen en Netflix.

Lo que puede pasar, y hay una buena posibilidad de que así sea, es que el mercado y la oferta sencillamente se sobresaturen, por tanto, se abaratarán, pues por muy Marvel y Lucasfilm que sean, todos sus contenidos nuevos no son gran cosa en horas, su catálogo previo ya está muy visto y no será su mayor atractivo. Cuando suponemos una baja de costos de suscripción, esta deberá ser verdaderamente dramática, pues lo que el público desea es más contenido y el único modo posible de ello es que cada oferta tenga su propio canal de vídeo en demanda, pero se hará imposible que sean muy costosos, para empezar porque cada uno terminará teniendo una biblioteca más bien reducida; puede convertirse en algo parecido a la tradicional televisión, en que haya varios canales y cada uno tenga su propio particular contenido, pero deberán ser mucho más accesibles en precio porque sino simplemente perderán a su preciado público.

Es mas, esto puede ser el inicio del fin de los formatos físicos, en que se encuentran en estanterías de tiendas de discos o especializadas las temporadas de las series de éxito o pasadas, para comenzar a migrar todos los contenidos a catálogos informáticos de vídeo en demanda, después de todo el pequeño inconveniente de los formatos físicos es que, una vez vistos, pasan a ocupar espacio en un librero, una caja, o donde sea para quizás no volver a ser vistos más que un par de ocasiones.

La televisión que hace una década aún parecía un invento invencible que llegó para quedarse sempiternamente, ha evolucionado, no es que vaya a desaparecer, pero los contenidos de entretenimiento, como las famosas series de género, que son las que han dado enorme éxito a plataformas como Netflix, son las que eventualmente terminarán abandonándola, puede ser a mediano o a largo plazo, es impreciso saberlo, pero se hace evidente que terminarán por dejarla, el vídeo en demanda ofrece ventajas sustanciales contra el típico horario para ver las series más gustadas, en streaming se pueden ver los contenidos deseados a la hora y el día que uno pueda o quiera y, tal vez lo más importante, completos, sin perder partes.

La televisión como se conoce hasta ahora seguirá existiendo, pero muy posiblemente conserve sólo los contenidos más pasajeros, como, por supuesto, los noticieros (¿alguien realmente tiene interés en ver un mismo noticiero más de una vez?), o los programas llamados de variedades, tan intrascendentes como cumplidores en llenar espacios durante las mañanas en que la gente predominantemente escucha la radio. Esta es una suposición basada en hechos cronológicos.