Reporte semanal, complemento; Lucasfilm es la que ahora está en problemas, el Escuadrón Suicida 2 ya tiene director

Por OscarFernando

Todos habían estado tan preocupados durante los últimos meses por los problemas que ha pasado Warner para encontrar realizadores que se hagan cargo de sus proyectos para el DCEU, que olvidaron como esto sucede hasta en las mejores compañías de cine. La que ahora pasa por un periplo parecido, si no es que hasta peor, es Lucasfilm, porque despide a sus realizadores cuando ya están prácticamente trabajando sobre sus películas, y es que apenas 24 horas después de hacerse pública la salida de Colin Trevorrow del Episodio IX de Star Wars, comienzan a surgir los datos sobre a qué se debió esto. Tal parece que el director no estuvo de acuerdo con la reescritura del guion a cargo de Jack Thorne que se ordenó hace unas semanas sobre el que él había realizado originalmente junto con su colaborador Derek Connolly, después de todo llevaba dos años dedicándole a este proyecto y todo para que a Kathleen Kennedy no le gustara lo que en principio entregó.

Hasta ahora, eso es lo que se sabe, que fueron diferencias creativas en cuanto a la historia propuesta, así que Kennedy debe tener una idea muy clara de qué rumbo piensa dar a la saga, pero a los directores de plano no les está gustando la injerencia y presión que la productora ejerce sobre ellos, pues esto está pasando en casi todas sus películas, nada más recordar que desde el Episodio VII circuló la versión de que en algún momento JJ Abrams tuvo desacuerdos con ella; después estuvo el despido de Josh Trank, aunque no lo hayan manejado así, pero en ese caso prácticamente todos están de acuerdo con que fue lo mejor considerando el pésimo resultado de sus Cuatro Fantásticos; muy recientemente está la salida de Phil Lord y Chris Miller del filme del joven Han Solo, aún sin título, que ellos mismos tomaron muy profesionalmente sin decir nada malo, pero ya se sabe que fue porque estaban dándole una orientación abiertamente de comedia; y, ahora sucede esto que no da exactamente una buena imagen de la compañía.

De momento, las cosas siguen iguales, Ram Bergman permanece como productor de lo que será ese Episodio IX, como lo es del Episodio VIII que estrena ya en tres meses, mientras la compañía mantiene la fecha de estreno de aquel Episodio IX para mayo de 2019, lo cual se ve inminente que sea pospuesto, pues si bien algunas fuentes consideran en preproducción, ello deberá ser ahora retrasado. Las versiones, como francamente era predecible, apuntan a que JJ Abrams o Rian Johnson puedan ser quienes tomen el encargo, pero ello es difícil de afirmar aún, lo cierto es que Kennedy se acaba de hacer muy buena fama de controladora e impositiva, aunque, eso sí, da muy buenos resultados.

En las infaltables de cine cómic, aunque extraoficialmente está pospuesta unos meses, pues no se ha fechado hasta ahora, el Escuadrón Suicida 2 ya tiene director asignado tras larga búsqueda, Gavin O’Connor, quien realizara El Contador con Ben Affleck el año pasado, y quien curiosamente sonara también desde el año pasado para hacerse cargo de la película de Batman que ahora está a cargo de Matt Reeves.

Cambiando de notas, resulta que Paramount anunció que compró los derechos para la adaptación de la novela Dracul, precuela autorizada de los deudos de Bram Stoker sobre su inmortal novela vampírica por excelencia, Drácula, la cual aún no se publica y será coautoría de J.D. Barker y Dacre Stoker, sobrino bisnieto del autor que ya ha escrito materiales adicionales y técnicamente oficiales del conocido personaje de horror, y tienen en la mira a Andrés Muschietti para la dirección, quien ahora goza de fama, fortuna y reconocimiento con su nueva adaptación de Eso del maestro Stephen King, que amenaza con convertirse en uno de los grandes éxitos de terror.

Muchos han visto de inmediato esto como una respuesta al Universo Oscuro de Universal, que tuvo un muy desangelado arranque con La Momia de Tom Cruise, porque Alex Kurtzman por lo visto solo estuvo ahí para cumplirle todos sus caprichitos. Esta percepción puede ser un poco exagerada, pues en realidad cualquiera podría hacerle la competencia a la propuesta de Universal, pues los monstruos de origen literario, que son la mayoría, ya están en dominio público, figura jurídica que por convenciones internacionales comienza a la muerte del autor, así que Barker y Stoker tendrán derechos sobre su novela todo el resto de sus vidas, y es Paramount la que ha llegado a un primer acuerdo con ellos; además, ya antes ha habido quienes retomen esta idea del universo compartido de monstruos, como los productores de Inframundo cuando realizaron su inocua película de Yo, Frankenstein, tenían algo así como esa intención, o la serie de películas de los setentas de la productora inglesa Hammer.

Por último, otra nota que logró llamar poderosamente la atención por buenas razones y es que las compañías Amazon Studios y Apple se han aliado en busca de los derechos de distribución nada menos que de la próxima película de James Bond. Es llamativo tanto porque con esto las dos empresas pretenden consolidar su presencia en el altamente lucrativo negocio de Hollywood, como porque evidentemente no deben ir solo por la distribución de la 25 misión del súper agente, sino también por lo que siga después. La distribución de Sony de estos filmes expiró en 2015 con Spectre, y desde entonces ha sido motivo de elucubraciones cuál distribuidora pueda hacerse de este negocio, de las que Warner iba adelantada al respecto, e incluso Sony podría prorrogar sus derechos, el caso es que el mismo Michael G. Wilson ya había declarado no ver más problema en esto pues más bien son varios los postores para quedarse con los codiciados derechos. Así las cosas.